Introducción
Un parto tradicional puede ser muy distinto de un lugar a otro en el mundo. El Dr. Bautista del hospital en la ciudad de Huanta, un distrito de Ayacucho, Perú, dice en una entrevista personal que el parto tradicional es un “término general” que abarca muchas elementos. Explica que no solo es la posición de la mujer durante un parto, sino también el uso de hierbas, rituales o costumbres. De acuerdo, la Sra. Fabian, la única obstetra del Centro de Salud en Luricocha (otro distrito en Ayacucho), define un parto tradicional como la adopción de “las costumbres de cómo ellas se enferman en sus casas.” Entonces, no es la manera específica de dar a luz, sino la manera en que las gestantes pueden realizar un parto de acuerdo con sus creencias. En este ensayo, voy a explicar los elementos principales del parto tradicional alto-andino con un enfoque en la región de Ayacucho donde hice investigaciones sobre este tema.
Idioma
En la región de Ayacucho y otras regiones alto-andinas del mundo, mucha gente habla o prefiere hablar quechua. Por esto, para cumplir un parto tradicional real, los asistentes deben adecuarse a la lengua de la gestante y su familia. Como apunta la Sra. Fabian, “si son quechua hablantes tenemos que hablar en quechua, o no nos entienden lo que queremos decirles.” Entonces, hay circunstancias en que las familias de hecho no hablan castellano y los obstetras y médicos y enfermeras no tienen más remedio que hablar quechua. Por eso, es muy importante que los hospitales y centros de salud tengan trabajadores que son capaces de hablar ambos idiomas: castellano y quechua.
Vestido
La ropa que pueden llevar las mujeres durante sus partos es muy importante a la tradición de la región. Típicamente en las regiones peruanas alto-andinas, las mujeres llevan grandes faldas coloridas que se llama polleras. Muchas de las mujeres se sienten incómodas y expuestas cuando llegan a los hospitales o los centros de salud y tienen que ponerse una bata que no es tradicional a sus costumbres. Por esto, muchos puestos de salud han cambiado para que las pacientes puedan llevar sus polleras tradicionales con tal de que sean limpias. La Sra. Fabian afirma que, “Ahora la ropa [que] les estamos poniendo [es] una bata o ellas traen [una pollera] a veces, y yo les digo si ellas no quieran usar la bata que traigan un justán (falda) de ellas que sea ligero o limpio…porque a veces nos traen justanes que usan en la chacra y están un poco sucios.” Con un compromiso muy razonable (de traer una falda limpia), las gestantes en algunos centros de salud pueden mantener sus costumbres de vestido durante sus partos.
Además de las faldas tradicionales, a las gestantes alto-andinas les gusta usar un cinturón tejido, que se llama un chumpi o una faja, durante y después del parto. Es un cinturón que se lleva arriba de la barriga para controlar la cantidad de sangre que sale del cuerpo. A veces, los chumpis tienen rolletes hechos de lana, en la forma de bolas que ponen presión a la altura del fondo uterino para ayudar con el dolor de las contracciones. Muchas mujeres traen sus chumpis a los hospitales y centros de salud para mantener sus costumbres del parto.
Placenta
En muchos partos tradicionales, hay mucha significancia sobre qué se hace con la placenta después del parto. Hay muchas creencias sobre el uso y la eliminación de la placenta y es algo que contribuye mucho a un parto tradicional. En Ayacucho, hay una creencia muy fuerte sobre el parto que se tiene que llevar la placenta bien abrigada y enterrarla para que no le dé aire después del parto. La mamá Neli del pueblo de Luricocha, quién ha dado a luz a sus seis hijos con parto tradicional vertical, expresa que si la placenta recibe aire, se inflama el cuerpo de la mamá. Por supuesto hay otras costumbres sobre la placenta del mundo considerando el parto tradicional. Una partera jubilada, Mercedes Oré de la comunidad Okana en Ayacucho, expone que algunos la entierran “para que no se coma algún animal y para que no apeste”. También ella reconoce la creencia que la madre puede enfermarse si la placenta recibe aire. La mamá Neli reclama que con sus primeros cinco hijos quiénes les daba a luz en casa con solo la ayuda de su abuelita, habían enterrado la placenta. Pero con su sexto hijo, le dio luz en el centro de salud porque su abuela había fallecido.
Medicinas naturales
La medicina natural es un componente muy influyente en muchas partas partes del mundo. Hay un montón de hierbas naturales que utilizan las gestantes para ayudar en sus partos, pero algunas son más comunes que otras. De hecho, el Ministerio de Salud en Perú (MINSA) ha publicado una lista de treinta y una plantas y hierbas que ayudan en el parto como muña, apio, orégano, toronjil, o marmaquilla. Por ejemplo, una hierba que la mamá Neli enfatiza es rajachi, que ella dice “es bueno para expulsar toda la sangre”. Hoy día muchos de los centros de salud permiten que las gestantes traigan sus remedios naturales para apoyarse en sus partos. El Dr. Bautista del hospital de Huanta en Ayacucho reflexiona que “Hay que respetar [sus rituales]. No son dañinos, al contrario se ha mostrado que algunas cosas que ellas toman, algunas hierbas hacen que dilate mejor el cuello vaginal.”
Parto vertical
El Ministerio de Salud define un parto vertical de la manera siguiente:
El parto vertical es aquel en el que la gestante se coloca en posición vertical (de pie, sentada, apoyando una o dos rodillas, o de cuclillas), mientras que el personal de salud que atiende el parto se coloca delante o detrás de la gestante, espera y atiende el parto. Esta posición permite al producto que actúa como vector final resultante de las fuerzas de expulsivo, orientarse principalmente al canal de parto y de esta manera facilita el nacimiento, disminuyendo los traumatismos en el recién nacido (Soler et al 16).
Sin embargo, en la región de Ayacucho y otras regiones alto-andinas, tienen la costumbre de utilizar una forma especifica del parto vertical.
Lo que define el parto tradicional en Ayacucho más que nada es la posición vertical con una soga. Durante el parto, la mujer está sentada en un banquito pequeño en la forma de media luna, de aproximadamente treinta centímetros de altura. Su esposo o alguien que va a acompañar a la mujer se sienta en una silla un poco más alta, detrás de la mujer. Está abrazando a la gestante por detrás con sus manos arriba de la barriga para apoyar a la mujer. La gestante agarra una soga colgada del techo para tener más fuerza al pujar. Frente a la mujer se sienta el obstetra o asistente en un banco giratorio para coger al bebé. La mujer y su acompañante se sientan en una tarima veinte y dos centímetros más alto del personal para que el obstetra pueda ver y ayudar a la gestante con comodidad. También hay un pellejo en el piso bajo de la mujer para que haya algo suave para el bebé cuando nazca (Modelo de atención con adecuación intercultural en salud materna perinatal 50).
Médicamente, el parto vertical tiene muchos beneficios y hace que el parto sea más fácil, rápido y cómodo para la paciente. El Dr. Bautista expone que “desde el punto de vista de un médico, definitivamente se ha demostrado que el parto vertical es el parto más fisiológico…es más fácil para el parturiente.” Las razones por esto incluye que la gestante tiene más fuerza cuando está en posición vertical y cuando tiene la opción de agarrar la soga y puede pujar más para que el bebé nazca más rápido. También, cuando es vertical tiene la fuerza de la gravedad que ayuda mucho en el parto. La obstetra y jefe de obstetricia en el hospital “Apoyo Huanta,” la Sra. Riveras afirma que durante un parto vertical, la “vagina…se pone mas elástica, no es más dura…tienes la facilidad de contraer [cuando] tú estás en periodo expulsivo.”
Las mujeres también consideran que el parto vertical es mucho más cómodo y menos doloroso. Por ejemplo, la mamá Vianeé De La Torre Castro, quién dio a luz a su primer hijo horizontal y a su hija vertical, dice que “Para mí es mejor el vertical, porque cuando es horizontal, no puedes pujar, ¿no? No hay fuerza. En cambio cuando estás vertical con la soguita te agarras. Allí, hay fuerza.” Ella no había planeado tener un parto vertical con su hija, pero durante el parto tenía tanto dolor que no podía subir a la camilla y decidió dar a luz verticalmente. A su sorpresa, ella se dio cuenta que su segundo parto fue mucho más fácil y rápido.
Conclusión
En resumen, hay varios elementos que caracterizan un parto tradicional en la región de Ayaucucho. El parto tradicional—que es algo único a cada cultura—define algo muy importante en la vida de una mujer. En el caso de Ayacucho, los elementos más importantes del parto tradicional son el idioma, el vestido, la disposición de la placenta, las medicinas naturales y finalmente la posición de la gestante en el parto. Sin respetar estos elementos, el parto no se puede considerar totalmente un parto tradicional de acuerdo con la cultura alto-andina.
Bibliografía
Bautista Tamaylla, Marco Antonio. Entrevista personal. 26 April 2011.
De la Torre Castro, Vianeé. Entrevista personal. 19 April 2011.
Fabian Huarcaya, Edith. Entrevista personal. 15 April 2011.
Modelo De Atención Con Adecuación Intercultural En Salud Materna Perinatal. Ministerio De Salud. Impresa.
Oré, Mercedes. Entrevista personal. 25 April 2011.
Riveras Murillo, Sara. Personal interview. 14 April 2011.
Solar, Pilar Mazzetti, et al. Norma Técnica Para La Atención Del Parto Vertical Con Adecuación Intercultural. Publicación. Lima: Ministerio De Salud, 2005. Impresa.
Velazquez Molina, Neli. Entrevista personal. 25 April 2011.
Disfruté mucho tu ensayo porque antes de leer, nunca he pensado en maneras diferentes del parto. La verdad es que era muy ignorante porque estoy acostumbrada a los partos horizontales en los EEUU. Entonces, el concepto del parto vertical es interesante. Parece que la gravedad sería muy útil en el escenario de un parto. Además, el concepto de la ropa tradicional es bien interesante. Es la verdad que los doctores en los EEUU, al menos, piden a los pacientes de llevar una bata. Es importante mantener las costumbres, y me imagino que muchos doctores no son acostumbrados a otros métodos de lo que han aprendido. El parto es una parte integral de cada cultura, y pienso que es importante mantener la originalidad que tiene cada cultura. Lo que me sorprende mucho es la frontera de lengua. Es muy triste que no hay más doctores que hablan quechua porque me imagino que las mujeres que van al hospital para dar la luz tienen miedo porque no entienden lo que dice su doctor. Es una experiencia no ideal, y espero que en el futuro, los hospitales puede mejor acomodar la población indígena.
ReplyDeleteMaggie, tienes información muy interesante en tu ensayo. La verdad es que no se mucho sobre el proceso de dar a luz en general y aun menos sobre los métodos en posición vertical. Sin embargo, el parto alto-andino me parece más lógico y más fácil. Como ya has dicho en tu ensayo, la fuerza de gravedad ayuda y la posición es mas cómoda..y a lo mejor el abrazo de esposo también le da a la mujer el apoyo emocional? Me pregunto si un día las sociedades más industrializadas van a adoptar este método de parto vertical.
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